Uniformes militares de todas las épocas y automóviles de gran antigüedad fueron los protagonistas de la jornada ayer en el centro de la ciudad, donde se desarrollaron las recreaciones históricas organizadas cada año por The Royal Green Jackets y el Rally Teresa Herrera de Vehículos Clásicos e Históricos.

Los Cantones fueron el punto en el que se llevaron a cabo los actos más vistosos de ambas iniciativas, aunque ya desde primera hora de la mañana se sucedieron diferentes actividades, como las demostraciones que se realizaron en el Museo Militar por parte de los grupos de recreación, así como la apertura al público en la zona de la Torre de Hércules de un fuerte romano, donde se efectuó el disparo de una catapulta. A partir de las 13.00 horas comenzó el desfile por Los Cantones de los participantes en Ariete, entre quienes los ataviados con uniformes de la época napoleónica y los de la II Guerra Mundial fueron quienes más llamaron la atención, ya que estos últimos incluso circularon a bordo de vehículos de aquellos años, tanto blindados como motos con sidecar, que participaron en recreaciones de la liberación de París.

Los amantes de los coches clásicos iniciaron la jornada con un desplazamiento hasta Betanzos, donde fueron recibidos en el Ayuntamiento y luego marcharon hasta Cines, en Oza dos Ríos, para comer. Ya por la tarde regresaron a la ciudad para llevar a cabo pruebas de habilidad en el Cantón Grande, donde hicieron las delicias de los aficionados a los automóviles al demostrar que, pese a su avanzada edad, estos aparatos aún son capaces de moverse con destreza en un casco urbano. Tras el final de la prueba, los conductores participaron en una cena en el Palacio de la Ópera.